Powered By Blogger

martes, 23 de febrero de 2010


Imaginándome a mi misma en un bosque, a la oscuridad de la noche y la poca luz radiante de la preciosa luna.
Lloviendo...y con un olor a humedad increíblemente cierto.
Me imagino con unos pantalones negros y sin camiseta después de haberme desgarrado y clavado las uñas en la piel.
Con los cabellos chorreando y el agua goteando en mis hombres y mi espalda. Pero el agua de la lluvia...no es la única goteando en mi piel, también resbalan por mi cara las lagrimas del fin.
Dando vueltas sin poder salir del "agujero negro" en el que me he sumergido.
Me apoyo en un árbol y caigo irrefrenablemente al pasarme un escalofrío desde la nunca a las orejas pasando por todos los nervios de mi cuerpo haciendo temblar mis piernas...
Me encojo pensando que el frio va a conseguir paralizarme y congelar mi corazón oscuro.
De repente paro de imaginar al oír mis propios gritos ahogándose en la soledad y la oscuridad que yo misma me he construido.
Siempre...atormentada hasta la eternidad...

2 comentarios:

  1. Ohhh textos tan hermosos como siempre, es la verdad. Pero todos tenemos nuestro dolor nuestra parte solitaria y oscura. ¿Imaginas mi actual amargura?.
    Todo lo que tenia a desaparecido...Os amo y os echo en falta... Marta.
    Pero...¿y tu?¿acaso me recuerdas?

    ¿Recuerdas al principe egocentrico que no valoraba tu amor?¿lo recuerdas?

    NO.

    Pero es comprensible...en el fondo sientes que soy un diablo.

    Espero tu respuesta con inpaciencia.

    ResponderEliminar
  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar

Seguidores